VIDA DE PISO y otras historias...
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Es la cuarta vez que me cambio de piso. Sí, sí, otra vez a hacer las maletas y trasladarte hasta la otra parte de Pamplona (a estas alturas conozco mejor esta ciudad que la que me vio nacer)
Si algo he aprendido de estos cambios es que los pisos de estudiantes siempre funcionan de la misma manera:
- Llegas y, para variar, te han dejado la peor habitación, que por supuesto, no tiene ventanas. Si tiene una ventanita no te alegres: ES LA VENTILACIÓN DEL CUARTO DE BAÑO.
- La televisión o es en blanco y negro y se cae de vieja o es tan pequeña como un ordenador. Estudiante ¡desengáñate! nunca podrás durante los años de carrera ver una película entera.
- La ducha parece un aspersor. No hay manera de lavarse el pelo porque cada chorro anda disparado. Por supuesto, la dueña nunca la arreglará hasta que no se te caiga la alcachofa en la cabeza.
- Los compañeros del piso majos. Sí, sí hasta que organicen la primera fiesta con los de su clase y te reciban con un "¡oh! se le había olvidado que al día siguiente tenías exámen". Por supuesto, al día siguiente nadie ha limpiado: "es que claro, si no íbamos a hacer mucho ruido recogiendo".
- Nunca pienses que tienes algo tuyo en el piso en cuanto lo noten desaparecerá. ¿Áquel yogourt de frutas silvestres que además es bio y desnatado? pues lo encontrarás al día siguiente vacío en la papelera: "es que se me cayó, se explotó y lo tuve que tirar. De verdad, ni lo he probado".
- De los cuatro fuegos de la cocina tres no van. Por lo tanto, se forman colas para cocinar. Cuando quieras coger aquella sartén que te has comprado en Todo a 100 para hacerte tu tortilla de guisantes seguro que la encuentras con el pegado del pescado de hace tres días. "¿Limpio o me compro un lote entero de sartenes y las escondo en la habitación?
- Pensabas que era el momento de que todo el mundo conociera tu habilidad en la cocina. Pero al final, acabarás haciendo macarrones para toda la semana con tal de no volver a cocinar. Los domingos cambiarás a la menestra congelada... Eso sí, te volverás un aficionado a la mayonesa.
En fin, que estos son mis conclusiones para los que empezais o os habéis cambiado otra vez de piso. Si queréis hacer algún comentario DECÍDMELO
Fdo: "El aspersor"